Hace ya algunos años que el concepto de “invertir en ladrillo como refugio seguro para ahorradores en épocas de inestabilidad” evolucionó hasta convertirse en un mercado lleno de posibilidades.
Desde la promoción propia hasta las nuevas opciones de crowdfunding, pasando por la compra de inmuebles con o sin deuda. Hay opciones para todos los perfiles y todas tienen ventajas e inconvenientes.
Sin embargo, si atendemos a valores objetivos como la rentabilidad, los impuestos aplicables, la necesidad de financiación o los costes de intermediación, la propuesta de Zertum destaca sobre el resto gracias a un modelo que evita las comisiones y reduce considerablemente los tiempos.
Elimina los intermediarios
Frente al modelo tradicional, en el que la compraventa de vivienda suele venir acompañada de gastos de intermediación que oscilan entre el 3 y 5% del precio de compra, en el modelo Zertum estos son inexistentes, evitándose también los gastos notariales o registrales.
Esto no solo supone un evidente ahorro. También tiene una implicación directa en la simplificación del proceso.
Convertirte en Socio Inversor y entrar a formar parte de un proyecto Zertum es un proceso sencillo y directo. Además, el uso de la tecnología facilita las gestiones y hace que todo sea rápido y muy seguro.
Reduce la carga impositiva
Una de las grandes ventajas del modelo Zertum es que no hay que soportar impuestos, directos ni indirectos, en el momento de realizar la inversión.
Y no se trata de un capítulo anecdótico. En el caso de vivienda nueva estamos hablando de un IVA del 10% del precio de compra. Y para la vivienda de segunda mano, el ITP asciende al 7%.
Tampoco será necesario el pago anual de IBI y otros tributos y tasas municipales, ya que esos gastos los soportará la sociedad titular de cada proyecto y no el Socio Inversor.
Y, en el caso de que un socio quiera vender sus participaciones de la sociedad, no tendrá que soportar la plusvalía municipal que sí se da en la venta de inmuebles, tributando únicamente por la ganancia patrimonial generada.
Evita el endeudamiento
El modelo Zertum presenta una característica muy destacable frente a los que contemplan la compra o construcción de la vivienda por parte del inversor: se trata de una aportación flexible.
Desde el precio de un único ticket, que varía entre los 10.000 € y 30.000 € según el proyecto, es posible invertir en el proyecto. Y la cantidad máxima depende del inversor.
Esta flexibilidad permite diversificar la inversión en varios proyectos o realizar un inversión mínima para familiarizarse con el modelo y experimentar sus ventajas en primera persona.
Pero, sobre todo, rompe una clara barrera de entrada al no requerir una gran cantidad de dinero para empezar, evitando la necesidad de buscar financiación bancaria.
Consigue beneficios antes
Las características de este modelo destacan también al hablar de rentabilidad.
Por ejemplo, si comparamos la compra de una vivienda de segunda mano para su alquiler frente a la propuesta de Zertum para 200.000€ de inversión, la plusvalía inicial sería negativa en el primer caso (sobre el -7 o el -8% dependiendo de la financiación) frente al 63% de Zertum (una vez finalizada la construcción del activo y puesto en servicio).
Y esto se refleja en el largo plazo en una mayor rentabilidad anual neta (entre el 2 y el 4% para el primer caso y más del 8% para el segundo) con un tiempo de recuperación de 19 años para el modelo Zertum frente a los 24 años para la inversión en una única vivienda sin acudir a financiación bancaria. En el caso de que hiciese falta solicitar un préstamo la cantidad podría ascender hasta los 45 años.
Ahorra tiempo
La eliminación de los intermediarios trae asociada, además de la evidente ventaja económica, una reducción importante del tiempo que es necesario para formalizar la inversión.
Adicionalmente, se reducen los procesos administrativos y se agiliza la puesta en práctica de las decisiones.
Asimismo, la salida de los Socios Inversores se puede realizar en cualquier momento sin más obligaciones que la de información previa y el derecho de compra preferente del resto de socios.
Al final, el modelo Zertum no solo funciona como una alternativa de inversión inmobiliaria rentable y flexible. También humaniza el sector simplificando los procesos y facilitando la entrada a cualquier perfil ahorrador.